Proyecto “estatista, intervencionista y centralizador” La Lista 15 rechaza la reforma de la salud

Por considerarlo “estatista, intervencionista y centralizador”, La Mesa Ejecutiva  Nacional de la Lista 15, del Partido Colorado se pronunció en contra del proyecto de ley que crea el Sistema Nacional Integrado de salud, el pasado martes 7, cuando recibió a  Representantes de las directivas de la Unión de la Mutualidad del Uruguay, Federación Médica del Interior, Plenario de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva, Centro de Asistencia del Sindicato Médico del Uruguay, Sindicato Médico, y de las cámaras de Emergencias Móviles y de Seguros privados.

Así informó el diputado por Colonia, Dr. Daniel Bianchi quien precisó que la decisión se concretó después de escuchar a representantes de todos los sectores empresariales que se desempeñan en el área de la salud.
Por su parte el diputado Bianchi  –médico de profesión– destacó que nuestro sector político respalda cualquier tipo de iniciativa que permita mejorar la prestación de servicios de salud, pero que la propuesta del oficialismo está lejos de ese propósito. Subrayó la amplia representatividad de los sectores recibidos por la Mesa Ejecutiva, y que la decisión de la Lista 15 guarda relación con lo escuchado en la oportunidad y que permitió comprobar que ninguno de los prestadores de servicios de salud –mutualistas, seguros, emergencias móviles– se mostró totalmente de acuerdo con la iniciativa del oficialismo y todos ellos plantean severos cuestionamientos al proyecto, incluso de orden constitucional y legal. “El proyecto crea una Junta Nacional de Salud que es inconstitucional”, agregó Bianchi, “porque se le asignan potestades por encima del Poder Ejecutivo [...] Además, la iniciativa va en contra de la facultad de elegir de los usuarios y resulta muy desfavorable para las instituciones médicas, no sólo desde lo que significa su desfinanciamiento, sino también en la calidad de sus prestaciones”. “Adicionalmente, va a generar una importante pérdida de fuentes de trabajo”, advirtió el diputado de Colonia.

El legislador recordó también que la financiación del sistema requiere de un aporte del 3% adicional al descuento que ya se hace por concepto de impuesto a la renta, y que eso significa otro golpe para la economía de los ciudadanos.
Bianchi detalló “otros elementos desequilibrantes” de la iniciativa del gobierno,  entre los que mencionó la incertidumbre respecto al monto de los recursos afectados al sistema, las diferencias de criterio en cuanto a la fijación de las “capitas” (cuota por afiliado) y su distribución. “Es una forma de emparejar para abajo”, lamentó.
A su vez el senador Isaac Alfie, sostuvo que el proyecto “va a la estatización total del sistema, con su consecuente deterioro”.

Adelantó que si la iniciativa prospera en los términos en los que ha sido concebida “creará dos categorías de usuarios: aquellos pocos que conserven la posibilidad de acceder a la salud privada, y la inmensa mayoría que verá un constante deterioro en la calidad de la atención”.

A su vez, el diputado José Amorín evaluó como “absolutamente negativa” la propuesta del oficialismo y criticó que “nadie sabe cómo se hacen algunos cálculos”, lo que permite adelantar un deterioro en el funcionamiento del sistema.

Principales objeciones

Representantes de las directivas de la Unión de la Mutualidad del Uruguay, Federación Médica del Interior, Plenario de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva, Centro de Asistencia del Sindicato Médico del Uruguay, Sindicato Médico, y de las cámaras de Emergencias Móviles y de Seguros privados, dieron cuenta de sus objeciones al proyecto del gobierno en materia de reforma de la salud ante los integrantes de la Mesa Ejecutiva de la Lista 15.Coincidieron las críticas al sistema de financiación previsto por el proyecto de ley, con carencias que pueden resultar desequilibrantes.
           

Destacaron que tampoco se conoce el monto global de recursos afectados al sistema, así como existen fuertes discrepancias respecto a la fijación y distribución de las cuotas, y también para su distribución.No hay previsiones sobre la forma cómo se van a coordinar los servicios de salud, y tampoco define la territorialidad del sistema ni la progresividad de la atención, al tiempo que amplía la canasta asistencial sin financiación. Una mayoría de usuarios tendrá que afrontar dobles costos por efecto de los aportes más la afiliación a emergencias móviles o seguros privados.No deja libertad de elección y tampoco asegura que se mejore la accesibilidad y la calidad asistencial, por el contrario, se prevé un progresivo empeoramiento.Las gremiales médicas no fueron escuchadas para elaborar la iniciativa, que tampoco resuelve los problemas derivados del multiempleo, ni mejora la condición laboral. Las instituciones prevén una fuerte pérdida de independencia y de autonomía de gestión, condiciones de competencia desleal de parte de ASSE y una fuerte estatización del sistema.